La vida es así. Torcida y difícil; a veces, maravillosa, pero muchas veces, complicada, indescifrable, como si vivieras en un enorme laberinto cuya salida no encuentras.
Nada es lineal, vivimos una existencia llena de obstáculos a superar. Pienso que la vida va de descubrir nuestro propio camino, un camino único, tantas veces como sea necesario, tantas veces como nos veamos atrapados en el laberinto.
Cuando te pierdas en el laberinto de la vida, no te abandones, y construye tu propio camino. Una y mil veces. Aunque te sientas perdido, no abandones jamás,
P.D. Si quieres puedes descargar la imagen e intentar resolver el laberinto. Yo estoy en ello gracias a un amigo invisible, cercano y sensible, al que estoy enormemente agradecido por la inspiración y el reto.